Así lo anunció este sábado el general, Óscar Naranjo. Esta semana, un Fiscal de Florida consideró la extradición de Don Diego como la más importante desde el envío de los Rodríguez Orejuela.
El capo del cartel del norte del Valle, Diego León Montoya Sánchez, 'Don Diego', durmió anoche en una cárcel federal de Miami.
Allá llegó en un vuelo especial de la DEA tras un vigilado trámite de entrega que incluyó helicópteros artillados, centenares de agentes armados y el uso de varios vehículos blindados para moverlo durante cortos trayectos en los aeropuertos.
La fase final de su proceso de extradición empezó a las 7:30 de la mañana. El capo salió en un helicóptero desde la cárcel de Cómbita en Boyacá hacia Bogotá, donde le practicaron exámenes médicos y le una reseña de identidad antes de salir hacia Estados Unidos, a las 10:30 de la mañana.
Flaco, con un chaleco blindado sobre la chaqueta y sin mostrar la menor resistencia pasó a manos de los agentes de la DEA.
En E.U. celebraron extradición
Anoche, en un comunicado oficial, el fiscal federal del distrito sur de Florida, Alexander Acosta, dijo que 'Don Diego' deberá comparecer el próximo lunes ante un tribunal de Miami para responder, entre otros delitos, por homicidio y narcotráfico.
"Ningún caso de narcotráfico ha tenido tanta importancia desde la condena de los hermanos Rodríguez Orejuela, ex jefes del desarticulado cartel de la cocaína de Cali (Colombia)", precisó Acosta.
Montoya, por quien las autoridades de Estados Unidos ofrecían un recompensa de 5 millones de dólares, fue capturado por el Ejército en septiembre del año pasado en una finca en Zarzal (Valle).
Su cara aparecía junto a la de Osama Bin Laden en la lista de los 10 más buscados por el FBI en todo el mundo.
Inicialmente fue recluido en una fragata de la Armada en el Pacífico, pero a través de una tutela logró su traslado a la cárcel de Cómbita, donde estuvo durante cinco meses.
El pasado jueves el presidente Álvaro Uribe Vélez, tras recibir un concepto favorable de la Corte Suprema para la extradición, firmó su enví a Estados Unidos.
El director nacional de la Policía, general Óscar Naranjo, dijo que con la extradición de 'Don Diego' "se cierra el capítulo" de la violencia del Cartel del Norte del Valle, del que Montoya fue uno de los últimos grandes capos.
Gestión por víctimas
Tras su envío, el Gobierno queda con la obligación de asegurar que, desde el país del norte, el capo responda por los centenares de crímenes que ordenó, especialmente por la masacre de Trujillo (Valle), por la que había sido llamado a juicio en Colombia.
Al autorizar la extradición, la Corte Suprema le pidió al presidente Uribe que se asegure de que esa matanza, perpetrada por paramilitares y narcotraficantes a comienzos de los 90, no quede impune.
'Don Diego' se va también con los secretos de una de sus últimas movidas criminales: la infiltración de varias unidades del Ejército, especialmente en el suroccidente del país, donde su banda de sicarios, 'Los Machos', tuvo la colaboración de altos oficiales.
Los delitos que le achaca E.U.
El expediente en Estados Unidos compromete a 'Don Diego' con el envío de más de 500 toneladas de cocaína a ese país entre 1990 y el 2004.
También deberá responder por el homicidio, en el 2003, de John Jairo García Giraldo, alias '2 mil', en Miami. Supuestamente lo mataron por ser informante.
Su hermano Eugenio y su primo Carlos Felipe Toro ya habían sido enviados a Estados Unidos. Los dos se declararon "culpables de haber confabulado para enviar cocaína y fueron sentenciados a 21 y 19 años de cárcel, respectivamente", según una información oficial.
'Don Diego' permanecerá en Florida mientras concluye su proceso en ese distrito. Luego tendrá que responder por cargos ante el distrito de Columbia, Washington.
Su viaje para responder ante la justicia de Estados Unidos es un golpe mortal al antes poderoso cartel del norte del Valle.
300 toneladas de cacaína envió a Estados Unidos Diego León Montoya, 'Don Diego', entre 1990 y el 2004, según la justicia de ese país.
Masacre de Trujillo, su mayor pendiente en Colombia
Con la extradición de 'don Diego' a Estados Unidos, la justicia colombiana ve alejarse a un actor clave para el esclarecimiento de la masacre de Trujillo (Valle).
Varias organizaciones, apoyadas por la Procuraduría, pidieron aplazar el envío del capo a ese país en tanto se establecía su responsabilidad en el crimen, que cobró la vida de unas 300 personas entre 1986 y 1994.
'Don Diego' es señalado de haber ordenado, junto con Henry Loaiza Ceballos, el 'Alacrán', la matanza. Los dos eran jefes del cartel de Norte del Valle.
Es un caso por el que el Estado colombiano ya asumió su responsabilidad histórica y que acaba de ser reabierto por la Fiscalía. Junto a los dos narcos aparecen otras 20 personas a las que la Fiscalía les ordenó captura, entre ellos, miembros de la Fuerza Pública que habrían actuado en cooperación con narcos para perpetrar asesinatos, desapariciones y torturas.
Del sí de la Corte a la extradición se apartaron los magistrados Leonidas Bustos y Augusto Ibáñez, quienes consideraron que se debió emitir un concepto negativo para que el capo atendiera estos requerimientos ante los jueces colombianos.
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